Así es, Japón es un país un tanto diferente a los demás países europeos y de América. Algo muy peculiar es lo que tiene que ver con las propinas.
Dejar propinas en restaurantes, hoteles o cualquier servicio que se haya prestado es considerado mala educación, pues para ellos es como un insulto ya que parece que quien da la propina quiere aparentar superioridad.