El sándwich recibe su nombre de John Montagu, 4º. Conde de Sandwich, un aristócrata del siglo XVIII, aunque es muy poco probable que fuera inventado por él. Se dice de éste que le gustaba comer de esta forma porque así podía apostar sin ensuciarse los dedos.
John Montagu era un jugador empedernido y pasaba muchas horas delante de la mesa de juego. Un día a la hora de la comida estaba tan metido en el juego que le pidió a su sirviente le trajera “cualquier cosa para comer ahí mismo“. Al rato, el criado se presentó con una bandeja de alimentos. El conde, sin abandonar su puesto, cortó unas rodajas de “roast beef”, las colocó entre rebanadas de pan, y comió el emparedado sin interrumpir el juego. Tan orgulloso se sentía lord Sandwich de su creación que no dudó en mencionarla en su testamento, como el mejor legado que dejaba a su país.