¿Has escuchado esa palabra? Generalmente las personas lo usan al referirse a las personas que hablan mucho.
Según los diccionarios, es un vendedor ambulante, su mercado está en las plazas públicas, donde se avientan un gran choro mareador para vender algún elixir o ungüento milagroso. Pero ¿por qué se les llama así?
Este término nació hace 30 años en la Ciudad de México, cuando Meroil Yock un “médico” polaco llegó al zócalo vendiendo sus productos milagrosos cura todo.
Se hizo famoso por la forma de anunciar sus productos y otros empezaron a imitarlo. La gente comenzó a apodarlo merolico, en alusión a su apellido, desde entonces aquellos que imitan su forma de vender siguen siendo llamados de esa manera.
¿Qué tal?
