La fotografía fue publicada por la cuenta de Bamf Nación en Instagram y desde entonces ha recibido más de 145.000 “corazones rojos”.
Gabriel Marshallde de 8 años fue diagnosticado en el 2015 de un astrocitoma anaplásico, un tipo de tumor cerebral maligno poco frecuente.
Tras someterse a una exitosa cirugía, Gabriel quedó con una cicatriz en el lado derecho de su cabeza. Con el fin de aumentar su confianza en sí mismo, Josh Marshall, decidió hacerse un tatuaje exactamente igual que la cicatriz de su hijo.
Debido a que Gabriel siempre le contaba a su padre que se veía “como un monstruo”, Josh quiso apoyar al pequeño tatuándose la misma cicatriz que le había dejado la operación en la cabeza. Poco después, se tomaron una foto en la que ambos mostraban la misma cicatriz sin imaginarse que conmovería la Internet.
