El queso es uno de los alimentos más comunes y antiguos del mundo. ¿Quién inventó el queso? ¿Cómo se originó o quien lo descubrió? Bueno, es uno de los misterios de este increíble y delicioso alimento.
A lo largo del planeta hay un sinfín de variedades de queso. Y existen lugares que se han vuelto experto en los quesos.
Hay miles de diferentes tipo de queso que se hacen de leche de vaca, cabra y oveja y yak, y muchas otras formas de servirlos. Es todo un universo de sabores.
¿Quién inventó el queso? O ¿cómo se descubrió?
Una historia del queso muy conocido muestra cómo se inventó el queso.
El descubrimiento del queso se le atribuye a un desconocido nómada asiático que, viajando por el desierto del Medio Oriente, trató de guardar leche en un bolsa de estómago seco de animal. Pero la renina y la pepsina que aún quedaban en el estómago seco del mamífero hizo que se separa el agua y el sólido de la leche, es decir, se separó la cuajada del suero. Cuando el viajero sediento abrió el recipiente para tomar un poco de leche, descubrió que se había formado un sencillo queso. Según esta curiosa historia, así se inventó el queso por primera vez.
Su bolsa de cuero animal, el calor, y el movimiento del camello fueron los ingredientes básicos que se necesitan para hacer el queso.
Esta historia tiene algunas variantes, pero en esencia se cuenta la misma historia para explicar cómo y dónde se inventó el queso.
En términos simples casi todos los quesos se hacen de la misma manera.
El queso en la historia
Se dice que las primeras personas que fabricaron el queso vivieron en el medio Oriente hace más de 4.000 años
En sus inicios , la importancia del queso dependía de si era capaz de mantenerse fresco por un largo período de tiempo.
Los quesos se agrupan de acuerdo con su dureza o suavidad. Hay quienes los dividen en cuatro tipos principales: suave, semisuave, duro y muy duro.
Los más suaves contienen más humedad que los otros , pero los más
duros son los que se conservan mejor.
Los huecos que tienen algunos quesos se llaman “ojos” y son burbujas causadas por los gases que liberan las bacterias que contiene el queso.
Aunque el queso desarrolle moho, puede comerse, solo debes quitarle al queso alrededor de 1/2 cm de su corteza exterior.
El queso es uno de los alimentos más consumidos del mundo, desde las islas hasta las montañas, y cada lugar tiene su peculiar forma de hacerlo y servirlo.
La próxima vez que comas queso recuerda la historia de aquel viajero que quería beber un poco de leche y descubrió una masa blanca, el queso, en su lugar, que ha revolucionado la gastronomía mundial.
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