La publicidad es la acción que se realiza para que una cosa se llegue a notar. Y en la naturaleza hallamos los primeros anuncios, los cuales son utilizados para la preservación y la propagación de la vida.
Por ejemplo, tenemos el aullido del lobo, con el que comunica su presencia y así evita encontrarse con otras manadas cuando andan buscando alimento.
En las mariposas, el macho libera feromonas para anunciar que está buscando pareja y estas son detectadas a kilómetros de distancia. Y los colores negro y amarillo de la oruga de la mariposa Cinabrio advierten a sus depredadores que su sabor es tanto desagradable como tóxico.
Primeros anuncios hechos por el hombre
Con el tiempo, el hombre también llego a realizar sus anuncios. En Egipto, se halló un papiro en Tebas que fue escrito hace más de tres mil años, y anunciaba una recompensa para quien devolviese a un esclavo fugitivo al lugar “donde se tejen las más bellas telas”.
En la antigua Grecia, el reformador político Solón, cerca del año 480 a.C., escribió un código de leyes en un paralelípido, acto que para algunos fue catalogado un medio de propaganda.
Y en la provincia china de Hunán, fue descubierto un papel con el impreso publicitario más antiguo. Tiene más de 700 años de antigüedad y se cree que era para empaquetar pinturas. En la esquina derecha del papel aparecen impresas las características del artículo, la dirección del comerciante y la frase: “En comparación con otras pinturas al óleo, el tono de nuestro producto es único”.
Hoy la publicidad es tan efectiva que en algunos países pueden verse hasta 3.000 anuncios al día.
Ilustración: | https://www.behance.net/khademsadegh.