¿Puede una serpiente acabar con un bosque? Si estamos hablando de la isla del Pacífico de Guam, la respuesta es sí.
Localizada en el Pacífico occidental, la isla Guam está siendo exterminada lentamente por una serpiente: la serpiente arbórea marrón. Aunque la especie no es peligrosa para los seres humanos, sus efectos sobre la fauna son devastadores.
La serpiente arbórea marrón posee una cabeza ancha, sus pupilas son verticales, los cuales se abren de par en par por la noche para facilitar la caza. Su cuerpo largo y delgado le permite trepar árboles, enredaderas y rocas. Se alimenta de pájaros, lagartos, murciélagos y ratones.
Se introdujo en Guam a mediados de la década de 1940 y se extendió rápidamente por toda la isla. Al mismo tiempo, las poblaciones de aves en Guam comenzaron a declinar misteriosamente. Durante años, nadie supo por qué. No fue sino hasta la década de 1980 cuando los científicos hicieron la conexión entre la pérdida de las aves y la serpiente invasora.
En la actualidad, se han perdido 10 de las 12 especies de aves forestales originales de Guam. Los dos restantes se consideran funcionalmente extintos.
Pero, el daño ecológico no se detiene allí. La pérdida de especies de aves nativas ha provocado algunos cambios inesperados en los bosques de Guam. Al matar a las especies que transportan las semillas como pájaros o murciélagos, las serpientes impide que el bosque tropical se renueve.
Ante la grave amenaza, el gobierno estadounidense trató de contener la plaga arrojando miles de ratones envenenados sobre Guam. Los ratones estaban rellenos con 80 mg de paracetamol, un medicamento para el dolor, pero un arma mortal para las serpientes arbórea marrón.
La mayoría de estas estrategias se han centrado en evitar que las especies de serpientes salgan de Guam y se cuelen en barcos que se dirigen a otras islas, como Hawai, donde los científicos temen que los depredadores puedan causar estragos similares.
Los depredadores invasores son una seria amenaza para muchos ecosistemas, particularmente en las islas, y la situación en Guam es extrema.